escuela alisios

Cursos Yacht 041022

Capítulo 9


Os dejo varias pinturas más sobre el tema anterior; cualquier marina vale la pena, así que estas más. La primera representa claramente los tan conocidos galeones y, quizá, alguna urca.

Foto BNP 09 01
 

Cornelis Claesz Van Wieringen (1580 – 1633): La Armada Invencible en las costas inglesas.

 

Foto BNP 09 02
 

Oswald Walters Brierley (1817-1894): La Armada Española saliendo del puerto del Ferrol.
La segunda, algo más borrosa, también, pero ¿qué son los veleros pequeños de ambas pinturas?


Foto BNP 09 03
 

Otra más de la batalla de Gravelinas. ¡Qué cansinos estos ingleses!
Tipos de barcos según algunos pintores. En este caso son según la visión de Pieter Brueghel.

 

Foto BNP 09 04
Navío mercante (sobre 1565).

 

Foto BNP 09 05
 

Galeón portugués, siglo XVI (sospechosísimamente igual al anterior, bueno no es excluyente).

 

Foto BNP 09 06
 

Otra imagen de un navío mercante del siglo XVI

 

Foto BNP 09 07
 

Galeón, también del siglo XVI (este creo que ya lo puse cuando hablé de los galeones, pero es para que vaya con los que tengo de este pintor).

 

Foto BNP 09 08
 

Nao, siglo XVI

 

Foto BNP 09 09
 

Urca báltica, siglo XVI

 

Foto BNP 09 10 

Flota de galeras (parecen más bien galeotas) escoltadas por una carabela.

 

Foto BNP 09 11
Esta otra urca no tengo idea de quién es, no puse el nombre en el archivo, pero las casitas y el sombrero de uno de los personajes parecen sospechosamente holandeses.
Vamos a hablar un poco del Libertad. (Aviso que los datos varían de unas fuentes a otras; he reflejado, finalmente, los leídos en un libro, frente a los de las páginas web)

 

Foto BNP 09 12
Botada en 1956, esta bonita fragata de tres palos y bauprés, de estructura de acero y superficie vélica de 2650 m2, mide 103,7 m. de eslora.

 

Foto BNP 09 13
Aquí tenemos señaladas (curiosa foto) las 27 velas que la adornan (el nº 28 corresponde a la botavara), cuyos nombres no voy a dar por que los sabéis y por no extenderme.

 

Foto BNP 09 14
 

Este buque escuela desplaza 3765 t. cargado y emplea 263 personas de tripulación, entre oficiales y marinos. Además puede adiestrar hasta 150 cadetes a la vez.

 

Foto BNP 09 15 

La efigie de la libertad, con el gorro frigio, es su mascarón de proa. No es de extrañar al ver el nombre.

 

Foto BNP 09 16
 

Activa y competitiva. En 1966 consiguió la “Gran Medalla”, en una competición de grandes veleros en el Atlántico Norte, con una marca de velocidad no superada todavía, según parece. Navegó 2059 millas entre Canadá y las islas

 

Foto BNP 09 17

 

Foto BNP 09 18
 

Debo confesar que, a pesar de que estos últimos veleros que traigo son muy bonitos, preciosos, muy rápidos y muy útiles, no tienen para mí tanto encanto como aquellos primeros de los que he hablado; son demasiado modernos, no guardan entre sus cuerdas y tablas los secretos que podrían susurrar, mientras recibes el viento en la cara, veleros como los de los descubridores y exploradores, los de la línea P o los demás cabohorneros. Algunos de ellos tuvieron triste fin o estuvieron inmisericordemente varados o se desintegraron poco a poco como:

 

Foto BNP 09 19
 

El Ambassador, uno de los últimos clíperes de construcción mixta (estructura de hierro y forro de madera o "composite") nacido en 1869, en Londres, que se enfrentó hasta a un huracán de fuerza 10, acabó sus días de gloria (ruta de Londres al oriente, o ruta del té) en 1875.

 

Foto BNP 09 20
 

El 10 de enero de 1896 lo adquiere un comerciante de Punta Arenas  que se lo vende a otros empresarios para usar como depósito de lanas y productos varios. Cerca de 40 años estuvo así hasta que sus propietarios decidieron vararlo en San Gregorio, junto al Amadeo, donde sus restos siguen descomponiéndose. Y eso que se había declarado monumento histórico el 7 de enero de 1974, ya aparejado en bricbarca.

 

Foto BNP 09 21
La nao Trinidad, que le cupo la gloria de ser una de las naves de la expedición de Sarmiento de Gamboa, historiador, explorador y científico español, que zarpó de Cádiz en 1581. Fue varada intencionadamente, en 1.584, en la costa Norte del Estrecho de Magallanes, debido a su mal estado, para aprovechar la madera y la clavazón.

 

Foto BNP 09 22
Así se pagaron sus servicios, ni un intento de repararla. Quizás no se podía.

 

Foto BNP 09 23
(Este grabado no viene en realidad a cuento, pero mola…)
La bricbarca francesa de tres palos Garonne, de casco de madera, tuvo la desgracia de naufragar, en 1851, precisamente en la Bahía Solano (Puerto Word). Y digo precisamente porque el conocido como, “El último pirata del Estrecho”, Miguel José Cambiazo, jefe de la guarnición de Punta Arenas se encargo de saquearla totalmente.



Foto BNP 09 24
 

Claro que, si hubo veleros que acabaron calladamente, hubo otros que se fueron dando mucha guerra, como el navío Glorioso del que tanto se ha hablado y del que aquí tenemos la representación de Cortellini, la más conocida:

 

Foto BNP 09 25
 

Pero ahí van dos cuadros más, menos conocidos.

 

Foto BNP 09 26
 

Curiosamente estos dos cuadros son más exaltados que el de Cortellini, (el más conocido y comentado, como digo) y rodean a nuestro navío de más enemigos, con lo que engrandecen su hazaña. Tal como fue.
Tenía este navío de 70 cañones agallas para aburrir. Sus hazañas fueron tan extraordinarias que los mismos ingleses, (que lo capturaron después de que se rindiera, al quedarse sin municiones, tras luchar solo contra varios y zurrarles de lo lindo, pero que les duró poquísimo en pie por las huellas del combate) dejaron noticias de ellas inmortalizándolas en un cuadro pintado, en 1747, por Charles Brooking (1723-1759). Los ingleses fueron menos parcos, en mostrar los enemigos que le cercaban, que nosotros mismos.


Foto BNP 09 27
 

Ya sabemos que venía de un peligroso viaje cuando llegó a la altura de Cádiz y se topó con una escuadra británica. Es el momento que recoge la pintura: en la parte central nuestro navío "Glorioso" (merecido nombre), que está a babor del "Russel" de 80 cañones. A babor del navío español está el "Dartmouth", de 50 cañones, envuelto en llamas tras el enfrentamiento, que se hunde sin remisión (sólo se salvaron 14 hombres de este navío). A popa del "Russel" está la fragata "Prince Frederick", gravemente dañada tras su encontronazo con el "Glorioso". Más atrás, otros buques británicos cercan al jabato español, que se enfrentó sin reposo a cuatro navíos y siete fragatas y que estaba capitaneado por don Pedro Mesía de la Cerda.



Foto BNP 09 28
 

O el navío Montañés,que sorprendido en marzo de 1795 por otra escuadra, esta vez francesa (Guerra de los Pirineos), se enfrentó y fue perseguido hasta el puerto de San Feliu de Guixols, por ocho navíos, uno de ellos de primera clase, y dos fragatas. El Montañés, gobernado por el Capitán de Navío Don José Jordán, resistió mas de dos horas de duro combate, hasta que los franceses tuvieron que marcharse sin poderse hacer con nuestro soberbio navío.
Pero claro, yo hablo de los barcos como si fuera un cuerpo vivo, prolongación de su comandante y su tripulación. Y es que así parece (cuando lees estos episodios de historia), como en el caso del navío Real Felipe, un tres puentes, el primero de España, que se distinguió en 1744, en la batalla del Cabo Sicié.


Foto BNP 09 29
 

Este navío, buque insignia del Jefe de Escuadra D. Juan José Navarro, acabó sus días, tras un durísimo combate, contra los ingleses, en Tolón en 1774, poco después de que lo hiciera su comandante, el capitán de navío D. Nicolás Geraldino, a consecuencia de las heridas recibidas en la frente. Este héroe, aun herido de muerte, no consintió que le retiraran del alcázar. Murieron también 2 oficiales y 45 hombres. Hubo, asimismo, además del general Juan José Navarro, 5 oficiales y 233 hombres heridos de los que 79 lo fueron tan gravemente que murieron más tarde. No cuento las víctimas de los otros barcos. Y eso que fue una victoria.

 

Foto BNP 09 30
 

Encontramos este texto (que copio literalmente) en la «Correspondance secrète de Louis XV»: Le combat de Toulon, en 1774, valut à L’amiral espagnol le titre pompeux de marquis de la Victoria. Quelle qu’eût été la conduite du comandant françois el la manœuvre de son escadre, il en resulta dès lors entre notre marine et celle d’Espagne du dégoùt, de l’humeur et méme de l’animosité ; ce deux corps ne servirent plus ensemble. Les espagnols fiers et contents d'eux mémes, ne voulurent pas compromettre leur gloire….
Hombre, si te parece, después de todo fueron unos aliados (que no amigos, es obvio) que llegaron ya tarde a este combate, cuando los inglese se habían retirado, y quisieron compartir la gloria sin muertos.
(Como soy un desastre para los idiomas creo que todo el mundo lo es, así que os lo traduzco. ¡Ojo! Como hace más de 35 años que no practico el francés, tampoco pongo la mano en el fuego por la traducción.) “El combate de Tolón, en 1744, le valió al almirante español el pomposo título de Marqués de la Victoria. Cualquiera que fuera la conducta del comandante francés y la maniobra de su escuadra, dio como resultado, desde este momento, entre nuestra marina y la de España el aborrecimiento, el mal humor e incluso la animosidad; los dos cuerpos no sirvieron nunca más juntos. Los españoles orgullos y satisfechos de ellos mismos, no quisieron comprometer su gloria…)”