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Cursos Yacht 041022

Las Motoras Tradicionales  
 Por motoras tradicionales se entienden esas embarcaciones con carena en <V> que tienen cubierta de proa prolongada en un parabrisas envolvente que protege del viento y de las salpicaduras a los pasajeros sentados en dos filas de asientos. En la actualidad se construyen caso todas de fibra de vidrio y suelen tener medidas iniciales de eslora de algo más de tres metros y medio hasta alcanzar los siete metros.

Las motorizaciones van desde un mínimo de 15-20 caballos en popa con un único fueraborda de cola corta hasta 250 caballos con una cola extralarga o dos motores gemelos de cola larga.
La finalidad de la motora tradicional es el turismo rápido costero.  

Con una motora se puede practicar con buenos resultados el esquí acuático.
Recordemos que con esquís especiales de gran sustentación se logra esquiar incluso con 15 caballos; la potencia ideal para remolcar a un esquiador que quiera divertirse y pese en torno a los 60-80 Kilos es de por lo menos 50 caballos para dos esquíes y 80 para el monoesquí.  


Los Botes Abiertos  

La polivalencia es una realidad funcional desde el momento mismo en que se proyecta.
Según las diferentes escuelas se construyen con casco en forma de ala de gaviota, trimaran, catamaran o en <V> incluso profunda y esta completamente abierta como se adivina por su propio nombre; ésta es la razón por la que en el bote abierto normalmente suela haber un amplio solarium en la proa en el que caben dos-tres personas tumbadas.  

La peculiaridad de este tipo de embarcación consiste en su habilidad, que es especialmente notable en los modelos de cinco metros y aun más, pero que resulta también satisfactoria en ejemplares más pequeños.
Este tipo de embarcación se puede definir como familiar; ofrece prestaciones elevadas y la posibilidad de pescar para él, el solarium y la escalerilla para bajar idóneos para ella, mucho espacio a bordo y la posibilidad de anclar cerca de la orilla para los niños.

Los botes abiertos también ofrecen un buen soporte como base para las inmersiones submarinistas.  
El autentico punto negro de estos barcos –que naturalmente resulta más evidente en los ejemplares pequeños, pero que no deja de tener su importancia incluso en embarcaciones de más de cinco metros- lo constituyen las salpicaduras.   


Los Barcos de Cabina
 

 Son barcos que tienen carena en <V> más o menos pronunciada o un casco con características de planeo o semiplaneo y que, además, ofrecen la posibilidad de resguardarse en una pequeña cabina.  
Las motoras con cabina, cuyo francobordo es alto, y con una bañera especialmente profunda, son ideales para quien quiera navegar llevando niños pequeños a bordo, ya que éstos podrán permanecer en la bañera durante la navegación sin peligro
de que puedan salirse de ellas, mientras que si el tiempo empeora se podrán refugiar en el interior de la cabina, o por lo menos colocarse de forma que la caseta misma le proteja.  

Los Botes y Lanchas de Desplazamiento

Son barcos que avanzan en desplazamiento, de forma lenta pero segura, llevan pocos caballos a popa, con una hélice de paso corto y cola con engranajes de fuerza con la que pueden hacer frente con éxito a un mar en contra.
Las lanchas y los botes son embarcaciones más bien pesadas, ya que son muy sólidas y representan prácticamente los únicos barcos que se construyen todavía corrientemente de madera.
Estas embarcaciones siempre se han concebido para fines de trabajo.  

Son barcos adecuados para quien suele dejarlos en el puerto durante las vacaciones y luego los recoge en una nave a poca distancia cuando se acaba la temporada.
Las lanchas y los botes son muy marineros y ofrecen también mucho espacio a bordo. Además, de barcos lentos, la carga se soporta muy bien y la velocidad de crucero no disminuye sensiblemente; por lo tanto, este tipo de embarcación es muy indicada para llevar a bordo grupos numerosos.  


Las Lanchas de Aluminio  

El aluminio, oportunamente tratado con anticorrosivos, se ha revelado un material muy idóneo para la construcción de barcos ligeros y bastantes resistentes, capaces de planear con muy pocos caballos a popa y con cargas considerables a bordo.
Estas embarcaciones se llevan la palma de la ligereza, lo cual es evidentemente representa una gran ventaja para su transportabilidad por tierra y para la posibilidad de vararlos sin tener que recurrir al esfuerzo de varias personas.

El espacio a bordo no es muy amplio.
Tienen un casco bastante plano para poder aprovechar al máximo sus dotes de velocidad, adolecen de poca estabilidad transversal cuando flotan sin navegar.  
Las lanchas de aluminio, al igual que los botes neumáticos de tamaño medio- pequeño, representan el medio náutico ideal para quien sale de vacaciones con un automóvil y una caravana, porque se puede cargar la embarcación en lo alto de la baca, y el motor se puede llevar en el maletero del coche.  


La Canoa
  

Las canoas de tipo canadiense  (las tradicionales de los pieles rojas) han sufrido una transformación que permite motorizarlas con pocos caballos –en general, hasta un máximo de cuatro- para desplazamientos bastantes rápidos en aguas interiores y tranquilas.

La adopción de un espejo de popa en lugar de la tradicional proa doble, ha permitido montar un pequeño fueraborda suficientemente para impulsar este pequeño casco muy ligero. Su uso está restringido a la navegación en ríos o pequeños lagos en los que el oleaje no es fuerte.
En la versión de motor, la canoa mantiene toda su ligereza, y un asola persona puede cargarla con entera facilidad de la baca.  

 
Los Botes Neumáticos  
Una característica típica del bote de goma es que no se hunde y, por lo tanto, da una gran sensación de seguridad.
Este tipo de embarcación esta dividido en cámaras (entre 2 y 5), según eslora y los criterios de construcción que se hayan adoptado, y puede volver a tierra incluso completamente desinflado, es decir, con todas las cámaras pinchadas y navegando a motor.

El tamaño tipo del bote de goma para cuatro personas es de alrededor de 3,80 metros; sin embargo hay que decir que su punto negativo es el espacio habitable a bordo.  
El bote de goma es ideal para quien quiera guardarlo en el sótano o en un armario durante la estación fría, siempre que mida menos de cuatro metros y tenga un peso total en torno a los 50 kilos, y dividido además en dos contenedores.  


Las Embarcaciones de Mayor Tamaño  

 Los fueraborda han demostrado su capacidad para imprimirle al casco una velocidad de aproximadamente un 30 % más respecto a los intrabordas de igual potencia, consumir menos a igual velocidad y garantizar los mismos depósitos con una  autonomía mayor.  
Los fueraborda ofrecen muchas ventajas en las embarcaciones grandes: menos ruido, menos ocupación de espacio y menos olor a combustible son, sin duda, las más evidentes.

Además, las operaciones de mantenimiento son muchos más sencillas. No existen manguitos que puedan romperse y abrir vías de agua.
Su precio, en cambio, es aproximadamente el mismo que el de los motores intraborda de igual potencia.  
L
a prudencia aconseja pintar los motores con cinc anticorrosión (recordemos que el cinc sirve para ser sacrificado a la corrosión debido a las corrientes galvánicas presentes en el agua de mar a causa del salitre; las corrientes atacan primero al cinc y luego al hierro) y tener mucho cuidado con la forma en que se atraca la embarcación.